El teatro, escuela de escepticismo
Conversación con Bruno Cardeñosa acerca de la relación estrecha entre el teatro griego y el escepticismo, y también de lo importante que es aplicar la epoje escéptica para los guionistas (y cualquier narrador). Puedes escuchar la entrevista o leer la transcripción.
BRUNO CARDEÑOSA: Daniel, tienes dos facetas, la de autor y la de escritor, con una profundidad enorme, fantástica, sobre este tipo de personajes. Este libro se titula Sabios, Ignorantes y Felices. El título lo dice todo. Y en tu otra parte profesional, te dedicas al mundo del cine, del guión, de la literatura. ¿Son mundos contradictorios o es una forma de poner los puntos sobre las iés a la fantasía y esto que llamamos la realidad? ¿O no existe ese enfrentamiento entre realidad y ficción? ¿O no está tan clara con estos sabios?
DANIEL TUBAU: Pues mira, tienen una relación estrechísima, de hecho en el libro dedico unos cuantos capítulos a los dramaturgos griegos, y ahí muestro que precisamente en la ficción es donde encontramos las mejores muestras del escepticismo. Primero, porque los escépticos usaban la ficción precisamente como una metáfora. Es decir: ¿y si resulta que somos actores de una obra y no lo sabemos, pero hay un director que nos ha creado y que nos dirige? O si todo este mundo es una ficción, etcétera. Pero, además, en los diálogos del teatro griego descubres un intercambio de opiniones realmente muy poderoso, donde cada uno de los interlocutores, Medea, Edipo, etcétera, dan razones muy poderosas, y sus rivales les responden con razones también muy poderosas. Se trata de una verdadera polémica con buenos argumentos. Un guionista tiene que hacer precisamente eso con sus personajes: aunque uno sea el malo y otro sea el bueno, el malo tiene que saber argumentar también, porque si no es un malo de cartón que no vale para nada, una especie de tópico.
Yo, en las clases de guión, desde hace años, siempre recomiendo mucho la suspensión del juicio escéptica, la epoje, suspender el juicio, en el sentido de que cuando estás escribiendo un guión, por un lado, lo que estás escribiendo te parece convincente, pero al mismo tiempo tienes que estar abierto a cambiarlo, y no ser demasiado fiel o quedarte aferrado a tus ideas iniciales. Tienes que ser capaz de ponerlas en cuestión, discutirlas e ir más allá. Y bueno, yo creo que realmente la ficción es importante. Bueno, comienzo el libro con una maravillosa ficción de un autor llamado Stanley Weinbaum y se plantea si todo es una ficción y estamos todos en una simulación de inteligencia artificial, en Matrix.