El origen de Esklepsis
PÓRTICO

Después de haber publicado cuatro números de Esklepsis, advierto que todavía no he explicado qué significa esklepsis. Lo haré ahora, y aprovecharé para recordar también el origen de esta revista.

Creo que la idea se me ocurrió en la Biblioteca Nacional, o al menos en una época en la que pasaba muchos días metido en aquel lugar.

Hice una primera edición a modo de prueba. El primer diseño para la portada era algo así:

 esklepsis-boceto

En ese número incluía los siguientes artículos:

1. Algunas aproximaciones a la noción de acumulación kármica (Lien Tau Buda)
2. Crítica del metafenomenalismo o trans-escepticismo (Ana Gracián)
3. La casa de citas: el nacionalismo
4. Ciencia: TOE y TGU
5. Lo que me une al cristianismo y lo que me separa del cristianismo
6. ¿Qué es el budismo?

Por esos días vi en una revista un anuncio en el que se ofrecía hacer un reloj con una esfera personalizada. Hice varios bocetos, en algunos de los cuales puse el nombre «ESKLEPSIS».

bocetos-relojes
Bocetos para esferas de relojes
bocetos-reloj-esklepsis01
Esfera de un reloj en la que se puede leer ESKLEPSIS siguiendo el sentido horario

Como el primer boceto de uno de estos dibujos lo hice en una servilleta del avión en el que volaba, he podido deducir la fecha, gracias a que en esa servilleta aparece el logotipo de la Expo 92 de Sevilla.

bocetos-reloj-esklepsis03
Otra esfera con las letras ESKLEPSIS en sentido horario, pero ahora agrupadas de dos en dos y la S final en el centro
bocetos-reloj-esklepsis02
En esta esfera se adivina la palabra Esklepsis tachada, pero tal vez se trate de otra palabra.

En consecuencia, debo suponer que la idea de sacar una revista llamada Esklepsis se me ocurrió ese año, o al menos la idea misma de ese asunto llamado «esklepsis».

 

 

Boceto de reloj en una servilleta de Iberia dedicada a la Expo 92
Boceto para una esfera de reloj, dibujado en una servilleta de Iberia dedicada a la Expo 92

 

¿Qué quiere decir Esklepsis?

Intentaré explicar qué significa ESKLEPSIS de manera gráfica:

Leyendo siempre de izquierda a derecha en las tres líneas de texto, se encuentra la palabra ESKLEPSIS
Leyendo siempre de izquierda a derecha en las tres líneas de texto, se encuentra la palabra ESKLEPSIS

Como se ve, «esklepsis» es una palabra, inventada por mí, que mezcla dos términos: escepticismo y eclecticismo, dando origen al esclepticismo.

Al principio dudaba cómo escribir esta nueva palabra. Pensé que en cada número de la revista la escribiría de distinta manera:

ESKLEPSIS
ESCLEPSIS
SKLEPSIS
SCLEPSIS
ESKLEPSYS
Etcétera.

 ¿Qué quería decir con esta nueva palabra?

Con esklepsis o esclepticismo pretendía definir de alguna manera mi pensamiento filosófico.

Siempre he sido contrario a las escuelas y a los sistemas filosóficos: kantismo, academicismo, aristotelismo, existencialismo, epicureísmo, estoicismo, cartesianismo… Creo que los sistemas son un impedimento para el pensamiento libre y sincero. Hay otros filósofos que opinan como yo, por ejemplo, Montaigne, Kierkegaard y Schopenhauer.
Pero me hacía gracia encontrar una palabra que definiera mi manera de pensar. Eso sí, tenía que hacerlo de una manera tan amplia y tan vaga que casi no significara una definición, y que en ningún caso se convirtiera en un sistema.

El escepticismo me gustaba, porque el escepticismo significa en su origen «seguir examinando» o «seguir investigando». El escéptico se propone dudar de las verdades absolutas, de los métodos demostrativos inatacables, de los dogmas y de los sistemas filosóficos.

Ahora bien, el escepticismo a veces ha llegado a convertirse casi en un sistema filosófico, cosa que yo rechazo. Para evitar ese peligro, busqué otra corriente filosófica más despreciada incluso que el escepticismo: el eclecticismo. El eclecticismo es tan pobre sistémicamente hablando que ni siquiera hay propiamente una escuela ecléctica, aunque algunos filósofos se han considerado a sí mismos eclécticos e incluso ha habido algún intento pintoresco de convertir el eclecticismo en una escuela.

¿Qué veo de bueno en el eclecticismo?

Más que nada que un ecléctico se plantea ante todo problemas. Eso es lo que me gusta de la filosofía: que se plantea problemas. No diré, como afirman algunos, que lo único importante sean los problemas o las preguntas: a mí también me interesan las soluciones y las respuestas (aunque sean siempre provisionales y dudosas). Pero un ecléctico, aunque se plantee preguntas y busque respuestas, no se siente atado a un sistema o a un modo concreto de interpretar la realidad, sino que examina las respuestas que otros filósofos, otras escuelas, o sencillamente otras personas han dado a esos problemas, y elige la que le parece más adecuada. Si después se plantea otro problema, el ecléctico no se siente obligado a adoptar la respuesta que le dan quienes le solucionaron el problema anterior, sino que elige de nuevo la respuesta que le parece más conveniente. ¿Y qué es una respuesta conveniente? En principio la que soluciona el problema, claro. En este sentido, el eclecticismo coincidiría con el pragmatismo americano de William James y Charles Sanders Peirce, y también con el utilitarismo. Sin embargo,  aunque siento cierta simpatía por las ideas pragmatistas y utilitaristas, creo que ambas caen en el error de constituirse en sistemas. Así que aplico el escepticismo a las soluciones halladas gracias al eclecticismo y escapo de este modo, y por partida doble, a la tentación sistémica y dogmática.

Ahora bien, ha de quedar claro que el esclepticismo no es un catálogo de respuestas, sino más bien una actitud.

Con todo esto, espero que haya quedado un poco más claro qué quiere decir ESKLEPSIS y por qué las dos primeras secciones de la revista siempre reproducen un texto que tiene que ver con el escepticismo y otro que tiene que ver con el eclecticismo.

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[Publicado en 1999]

NOTA EN 2013

Es curioso que algunos de los artículos que escribí para el primer borrador de Esklepsis no llegué a publicarlos nunca en la revista:

Algunas aproximaciones a la noción de acumulación kármica (Lien Tau Buda)
Este artículo acabé guardándolo, probablemente porque lo consideré demasiado ilegible incluso para mis amigos. A pesar de ello, lo leyó mi padre y le pareció «muy interesante». Aunque quizá esté escrito en un estilo demasiado filosófico, es cierto, creo, que contiene algunas ideas interesantes que han jugado un importante papel en mi vida y en mi pensamiento. El autor Lien Tau Buda o el Buda Lien Tau, sí publicó en Esklepsis algunos capítulos de «Otra introducción al budismo».

Ciencia: TOE y TGU
No se publicó, porque quise escribirlo bien (gran error) y el tema es inabarcable si no aceptamos un poco de imperfección. TOE significa Theory of Everything y se refiere a la teoría que lograría unificar todas las ciencias, en especial la física y la química, pero también la relatividad y la cuántica, logrando explicar de una manera completa, elegante y coherente, toda la realidad. La TGU es la Teoría de Gran Unificación, que lograría unificar tres de las grandes interacciones de la naturaleza: la fuerza nuclear débil, fuerza nuclear fuerte y la fuerza electromagnética. Sólo quedaría fuera la fuerza de gravedad, que sí lograría ser unificada a todas las demas en la Teoría del Todo o TOE.

 ¿Qué es el budismo?
Sí escribí varios capítulos, bajo el seudónimo Lien Tau Buda. Lamentablemente, el anhelo de perfección me llevó a leer tantos textos originales budistas que el asunto acabó resultando de nuevo inmanejable.

Crítica del metafenomenalismo o trans-escepticismo (Ana Gracián)
La casa de citas: el nacionalismo
Lo que me une al cristianismo y lo que me separa del cristianismo
En este caso, sí se publicaron los dos artículos en diversos números de Esklepsis. El del cristianismo en la sección «Tan cerca y tan lejos». Los que tienen enlace ya han sido publicados en la versión digital de Esklepsis.

En ¿Qué es Esklepsis? explico por qué hice la revista.

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(Para ver todos los números: ¿Qué es Esklepsis?)

 

 [El número 5 de Esklepsis fue publicado en 1999]

PÁGINAS DE ESKLEPSIS 5

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