Buenos y malos interpretadores
¿Cómo diferenciar un buen interpretador de un mal interpretador?
Un buen interpretador es aquel que al responder a las preguntas plantea otras.
Un mal interpretadores es aquel que al examinar la realidad pretende simplificarla, reducirla a tres o cuatro normas básicas, aquel que convierte la riqueza en pobreza, que lo examina todo a partir de sus prejuicios, seguridades, sin antes plantearse de dónde han nacido esos prejuicios y esas seguridades.
[Diciembre de 1985]