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Sabios ignorantes y felices, de Daniel Tubau
Sabios ignorantes y felices, de Daniel Tubau

Galería

El buenánimo de Demócrito y los peligros de la envidia
Es más fácil ver que escuchar
¿Ataca Tucídides a Pericles?
David Hume
Platón, ¿creador de la filosofía evasiva?
La impopularidad del imperio ateniense
No hay una única receta para la felicidad, pero sí recetas felices
Siete maneras de alcanzar la felicidad
La nostalgia de Pericles

2.3 Los bienes exteriores

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Para Demócrito, “la felicidad o desgracia humana no puede depender del azar ni de los dioses (fr.691)”, algo que Aristóteles expresa de muchas maneras. Asimismo, “ni el cuerpo ni las riquezas proporcionan felicidad a los hombres, sino la rectitud y la prudencia” (lamentablemente, también queda fuera de los límites de este trabajo analizar la gran importancia que para Aristóteles tiene la prudencia, virtud dianoética, como mejor guía para alcanzar la felicidad). Y a pesar de que las riquezas no son la felicidad, Demócrito no las rechaza de manera absoluta:

“Procurarse riquezas no es cosa inútil, pero es el peor de los males si su origen es la injusticia (fr.910)”.

En esto, evidentemente, tampoco se aleja de Aristóteles: ambos propondrían una respuesta intermedia, y tal vez la más coherente, entre la ética del protestantismo y la del catolicismo, tal como se expresa en la célebre distinción de Max Weber.

Ahora bien, para Demócrito, las vicisitudes pueden incluso tener un carácter terapéutico desde el punto de vista moral, pues “aquellos que carecen de inteligencia se vuelven sabios en el infortunio” (fr.886).

En conclusión, la proximidad de los análisis de Demócrito y de Aristóteles acerca de los bienes exteriores, es muy notable también. Como lo es el hecho de que ambos filósofos cifren la felicidad en el cumplimiento de la función propia del ser humano, que no es otra que la razón: “El hombre es feliz por su propio pensar y actuar racionales” (fr.691).


Sobre el concepto de prudencia en Aristóteles, existe un libro excelente: La prudence chez Aristote, de Pierre Aubenque, en el que se muestra la importancia central de esa noción en la ética de Aristóteles.
 

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Ética de Aristóteles y de Democrito: una comparación

Ética de Aristóteles y de Democrito: una comparación

Se examina en este trabajo la ética de Aristóteles, tal como es expuesta en el primer capítulo de su Ética a Nicómaco. Y se compara con la ética de Demócrito.

1.1 Bienes y fines. La política y el bien supremo

1.1 Bienes y fines. La política y el bien supremo

Antes de proseguir, sin embargo, Aristóteles, se ve en la obligación de advertir que la política no es una ciencia exacta, por lo que no se debe esperar de ella proposiciones demostrativas. Con ello, la ética de Aristóteles choca frontalmente con proyectos como el de Spinoza, de exponer la ética more geométrico

1.2 El bien supremo es la felicidad

1.2 El bien supremo es la felicidad

Aristóteles, vimos antes, ha alcanzado la conclusión de que el fin de la política es la felicidad. En cuanto a qué sea esa felicidad o bien supremo, Aristóteles examina primero las tres soluciones que se corresponden con los tres modos de vida, sensitivo, político y contemplativo


ÍNDICE

ÍNDICE

Introducción I. LA ÉTICA DE ARISTÓTELES 1. Bienes y fines. La política y el bien supremo 2. El bien supremo es la felicidad 3. La felicidad y los tres modos de vida 4. Refutación de la idea platónica de bien…

2.7 Conclusión

2.7 Conclusión

Sólo queda por comentar una cuestión que es tal vez la central en todo estudio de la ética aristotélica: el de su misma definición. La de Aristóteles es el ejemplo más repetido y el modelo más señalado de ética eudemonista,…

2.6 Pensamiento, palabra y acción

2.6 Pensamiento, palabra y acción

“Tres son las consecuencias de ser sabio: deliberar bien, hablar bien y obrar como se debe».

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2.3 Los bienes exteriores