• Las aventuras oníricas de Natalia

    Una estancia en Moralia [1991]
    1. Sueños y pesadillas

    Después de tres años de aventuras oníricas, a Natalia le espera un viaje inesperado en el que buscará respuestas al comportamiento humano. [Puedes leer las notas haciendo clic en ellas y expandirlas («expand») o cerrarlas (close). Pero también puedes leerlas todas seguidas al final de esta página]   Natalia !Ah! !No! !No! Arlequín ¡Natalia! Tranquila, no pasa nada. Es un mal sueño. Ya pasó. Natalia ¿Eh? Ah, eres tú. He tenido una horrible pesadilla. ¿Dónde estamos? Arlequín En tu casa de la calle Carranza [ref]Natalia vivía entonces en la calle Carranza del centro de Madrid, con su novio Japi; yo vivía en la calle Corazón de María[/ref]. Faltan pocas horas…

  • ENSAYOS,  Las aventuras oníricas de Natalia

    ¿Un sueño? [1989]

    PRESENTACIÓN Una voz Ailatán, sé que estás ahí, no te escondas Ailatan No pretendía esconderme, Natalia. Es sólo que soy demasiado vieja para andar más deprisa (recuerda que hoy cumples veintinueve años[ref] Y Ailatan, por tanto, cumple 92, ya que es el inverso de Natalia [/ref]. Además, no quiero despertarte. Natalia No te preocupes: ya estoy despierta. La verdad es que no he dormido en toda la noche, pues esperaba tu visita. Quería comprobar si todo esto, tus apariciones cada 1 de septiembre, eran reales o sólo un sueño, Ailatan Ah, Natalia, sigues siendo tan ingenua como la última vez. Pero yo ahora tengo 92 años y pocas ganas de iluminar…

  • Las aventuras oníricas de Natalia

    Natalia y Ailatan en busca del tiempo [1988]

      [Esta felicitación tiene notas, añadidas en 1997. Puedes verlas haciendo clic en las notas.  También puedes leer el texto completo de principio a fin -mucho más recomendable.-y después las notas, que también aparecen  situadas al final del texto. Hay vínculos para saltar en un instante desde el número a la nota correspondiente, y a la inversa]   366 DÍAS DESPUÉS… [ref]366 y no 365 días, porque el año 1988 fue bisiesto. [/ref] 1 de septiembre   Natalia ¿Quién anda ahí? Ah! Ya sé quién eres. Recuerdo que nos vimos el año pasado por estas fechas. Ailatan Sí, soy yo, Ailatan. Natalia Podrías haber esperado a que me despertase y…

  • Las aventuras oníricas de Natalia

    Un interludio absolutamente inevitable en el viaje de Natalia y Ailatan en busca del tiempo [1987]

    7. Las últimas razones y la razón última

    (Continúa desde: Un nuevo encuentro, Un argumento determinista, Un argumento cuántico, Un argumento existencial, Más argumentos, Una charla casual y causal acerca del libre albedrío) Natalia Me parece que lo mejor será lanzar una moneda al aire. Si sale cara, el determinismo es correcto; si sale cruz, lo es el indeterminismo. Es una buena manera de elegir. Demócrito Te equivocas: si lanzas una moneda al aire no resuelves el problema, y mucho menos eliges[ref]Es decir, el libre albedrío sólo es posible como término medio entre el azar y el determinismo o necesidad.[/ref] Natalia Ahora que lo dices, eso me recuerda algo que dice nuestro viejo amigo Gardiner[ref]Gardiner= Martin Gardner. El libro es…

  • Las aventuras oníricas de Natalia

    Un interludio absolutamente inevitable en el viaje de Natalia y Ailatan en busca del tiempo [1987]

    6. Una charla casual y causal acerca del libre albedrío

      (Continúa desde: Un nuevo encuentro, Un argumento determinista, Un argumento cuántico, Un argumento existencial, Más argumentos) Natalia Bueno, olvidemos a Gaunilo y a la Física cuántica, olvidemos el tiempo y las predicciones públicas, y supongamos que existe el demonio de Laplace. Eso significa que no existe el libre albedrío, puesto que todas las acciones están determinadas. Pues, si no estuviesen determinadas, el demonio no podría conocerlas por anticipado. Ailatan Pues sí, creo que es evidente que el libre albedrío no existe. Yehuda Ha Levi !En absoluto! Vosotras habláis de un demonio que conoce todo. Yo hablo de Dios. Dios conoce todo lo que ha sido, lo que es y lo que…