[email protected]

Sabios ignorantes y felices, de Daniel Tubau
Sabios ignorantes y felices, de Daniel Tubau

Galería

Siete maneras de alcanzar la felicidad
La nostalgia de Pericles
Antifonte, el demócrata y el antidemócrata
Elisa
El (no tan) demócrata Tucídides
Zenón de Elea | ¿Existe el movimiento?
Tucídides y el culto a los grandes hombres
Las lecciones de la experiencia
Los otros escépticos de la India

Las nociones innatas de Kant

(1985) La noción de tiempo no me parece innata en absoluto pues depende enteramente de los sentidos.

Un cerebro desconectado del exterior no podría, creo yo, percibir el tiempo. Viviría en la eternidad.

Por cierto, la noción de espacio tampoco me parece innata.

Creo que percibimos el espacio porque hay espacio, nada más. Eso es tarea de nuestros ojos, o de nuestro tacto, o incluso de nuestro oído olfato, y no tiene por qué estar dado a priori. Lo que está dado a priori son nuestros sentidos.

Es curioso que en estos últimos días me muevo de un lado a otro. Antes pensaba que los a priori de Kant eran absurdos, después, sobre todo ayer, llegué a pensar que eran un gran acierto. Ahora, de nuevo comienzo dudar de ellos. Pero no lo descarto completamente.

En realidad creo que me convencen más posturas como la de Konrad Lorenz, que me da la impresión de que redefine los a priori kantianos.

Exacto! Los a priori que determinan las formas en que se manifiestan las cosas reales de nuestro mundo, son dicho brevemente, un órgano, y de manera más precisa, la función de un órgano»

Ahora bien, Lorenz habla de un órgano, el cerebro, pero la pregunta podría ser: ¿son los demás órganos los que desarrollan el cerebro o es el cerebro el que desarrolla a los demás órganos? Yo creo que son los órganos los que «desarrollan» el cerebro. Pero obsérvese las comillas en desarrollan, pues…

notas en 1985

El texto son unas notas apresuradas, que quedan interrumpidas antes de responder a qué significan las comillas en «desarrollan»

Teoría de la variación

Teoría de la variación

Esta es la teoría que consiste en decir que hay que evitar tener los mismos hábitos, cumplir las mismas rutinas. A mí me gustaba hace…

El aumento de la nada

El aumento de la nada

(20 de agosto de 2010) «Vete, escóndete de este matadero para que no aumentes el número de los muertos». Ricardo III, IV Graciela comentó el…

Libros perdidos

Libros perdidos

Que alguien haya salvado los libros de Antioquía y se descubran.


El número 520 hace realidad un sueño

El número 520 hace realidad un sueño

Cuando era adolescente, imaginaba que algún día publicaría un artículo en Revista de Occidente, y aunque no creo que se cumplan todos los sueños, este sí que se ha cumplido:…

Siete maneras de ser feliz en el Ateneo de Madrid

Siete maneras de ser feliz en el Ateneo de Madrid

Este mes de julio lo pasaré en Madrid en compañía de un montón de filósofos griegos (y varios latinos) para recordar lo que pensaban acerca de la felicidad. Nos vemos…

Alta y baja cultura

Alta y baja cultura

Al poeta T.S. Eliot le gustaban muchísimo los Hermanos Marx. Fue muy amigo de Harpo Marx y, si recuerdo bien, tenía entre sus mayores orgullos una fotografía dedicada de Groucho.…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Las nociones innatas de Kant