-
Herejías medievales
Es muy comprensible que hubiera herejías en la Edad Media: la doctrina la predicaba un sacerdote que tenía una Biblia que él interpretaba como Dios le daba a entender, es decir, de cualquier manera. En el pueblo de al lado, otro cura tenía otra Biblia y la interpretaba también a su modo. Pocos sabían cuál era exactamente el dogma oficial y casi nadie (hasta la invención de la imprenta) podía comprobar si en la Biblia se decía realmente lo que decían los curas. (Este comentario no apareció en la versión definitiva de La verdadera historia de las sociedades secretas en 2008) La verdadera historia de las Sociedades Secretas Editorial…
-
Epicuro
El ilustre enfermo
Epicuro es uno de los ilustres enfermos más famosos de todos los tiempos. Nació en el año 341 antes de nuestra era en Samos. Estudio con Nausífanes, seguidor de Demócrito, y acabo estableciéndose en Atenas. Allí, cuando ya Alejandro había dejado su vida en el Palacio de Nabucodonosor, crea su propia escuela, a semejanza del Liceo de Aristóteles y la Academia de Platón. La suya se llamó el Jardín. Escribió muchísimas obras, en cuyos títulos se adivina que le interesaron todos los asuntos, aunque está muy difundido el tópico que asegura que despreciaba todos los conocimientos que no fueran el de la búsqueda de la felicidad. A él y a…
-
Dolor desplazado y fantasmas
Una comparación interesante entre el cuerpo humano y las casas habitadas por fantasmas: cuando sentimos un dolor en el hombro, eso puede deberse a un problema que tenemos en el hígado. El lugar del que procede el dolor y el lugar en el que sentimos el dolor no se corresponden necesariamente. Lo mismo sucede con los edificios: a veces oímos a nuestro vecino rascar la pared, o dar golpes, y lo oímos con gran nitidez, pudiendo localizar con gran precisión la procedencia del sonido. Y entonces, como me sucedió a mí ayer, nos acordamos de que no tenemos vecino. Los ruidos en un edificio son como el dolor en un…
-
Antología de Spoon River
Recuerdo haber visto este libro, en la sugerente edición de la editorial Barral, durante años en la biblioteca de mi madre. Es un objeto, una imagen, que ha logrado ocupar ese lugar especial de la memoria que alcanzan pocas cosas de las que se aparecen ante nuestros sentidos a lo largo de la vida. Leí el libro en la adolescencia, pero durante años lo he conservado en mi recuerdo como ese objeto hermoso, y sin duda macabro, de la edición de Barral. De los poemas apenas recordaba nada, tan solo
-
La apuesta de Buda
(A modo de epílogo a Acerca del karma) Es muy conocida la apuesta de Pascal. Blaise Pascal era un matemático prodigioso que sufrió o disfrutó de una iluminación súbita y se transformó en un piadoso cristiano. Como todavía amaba las matemáticas, se planteó su ardiente fe como un problema de probabilidades. El enunciado de su problema era el siguiente: Podemos pensar que dios existe o que dios no existe. Si no existe, es casi seguro qué debemos decir adiós a la inmortalidad o a la vida eterna. Pero si dios existe, entonces lo más probable es que también exista la vida eterna. Pues bien, supongamos a modo de hipótesis, que…