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Diatriba contra la virginidad
En A buen fin no hay mal principio, Parolles hace un ingenioso y bastante convincente ataque al deseo de mantenerse virgen: ELENA.- ¡Dios preserve nuestra castidad contra los minadores y asaltantes! ¿No conocéis estrategia alguna militar mediante la cual puedan las vírgenes hacer saltar a los hombres? PAROLLES.- Una vez perdida la virginidad, el hombre danzará más presto por los aires; y aunque consigáis rechazarlo, perderéis la ciudad por la brecha que vos misma habréis abierto. En la república de la naturaleza es impolítico conservar la virginidad. La pérdida de una virginidad implica provecho para la nación. Toda virginidad que nace procede de una virginidad perdida. La tela de que…
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La nada es nada
En la escena II de El rey Lear, asistimos a un ingenioso diálogo entre Gloster y Edmundo alrededor del concepto de «nada»: GLOSTER: ¿Qué papel es el que leíais? EDMUNDO: No es nada, señor. GLOSTER: ¿No? Entonces, ¿a qué viene ese terrible afán de guardaroslo en el bolsillo? La nada es de tal índole que no necesita esconderse. Veamos y, si no es nada, no precisaré de mis anteojos. Aquí, por cierto, me parece que falla la traducción de Astrana Marín, que resulta difícil de entender en una primera escucha: «La calidad de nada no tiene tal necesidad de ocultarse». Es muy preferible la frase que cito arriba, a pesar…
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Esto no es una página web
A muchos, el título de esta entrada les sonará a paradoja. Otra paradoja al estilo de aquel ensayo que tanta polémica causó en su primera edición: Por qué el mundo digital no es digital. Es posible que los lectores también recuerden el célebre cuadro de Magritte «Ceci n’est pas une pipe» («Esto no es una pipa»). Entonces, ¿se trata de una nueva paradoja, ante la que debemos sonreír con suficiencia y un poco de fatiga? Yo creo que no. A mí me gustan todo tipo de paradojas, pero mis preferidas no son las paradojas locas, aquellas que tan sólo plantean cosas imposibles o absurdas. A menudo son muy divertidas, pero…
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Empédocles, reencarnación, unidad y Shakespeare
Dice Empédocles: «Pero el altar no era regado con la sangre violenta de los toros» Creo que existe un parecido bastante sorprendente entre muchas de las cosas que dice Empédocles y algunas ideas brahmánicas, budistas, zen, etcétera. En especial en lo que se refiere a la reencarnación. Tengo que escribir una monografía acerca del tema de las transformaciones del ser. Me refiero a las transformaciones así en la Cad Goddeu, en la mitología irlandesa, en Las 1001 noches (la lucha entre los dos brujos) el verso de Empédocles que dice: «Yo ya he sido antes un muchacho y una muchacha, un arbusto, un pájaro y un mudo pez de mar.» Empédocles…