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Razón y sentidos en Demócrito
Se da en los pensadores presocráticos, dice un libro de texto, una creciente desconfianza hacia el papel jugado por los sentidos en el conocimiento de la realidad, que se convierte en desprecio hacia los sentidos en favor de la razón, sin comprender lo que tan lúcidamente expresa Demócrito en aquel pasaje en que se enfrentan la razón y los sentidos, y estos concluyen: «Oh, mísera razón, que tomas de nosotros tus certezas! ¿Tratas de destruirnos? Nuestra caída, sin duda, será tu propia destrucción» ********** (Fragmento del texto: «Razón y sentidos. La mala fortuna de Demócrito», de 1987)
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Razón y emoción
¿Dónde está la frontera que separa la razón de la emoción? Los escritores africanos reivindican la emoción frente a la razón -dice Caranci-, acusando a los europeos de dar mas importancia a la razón. Este reproche, por supuesto, notiene sentido más que en algún aspecto muy limitado, ya que los europeos a lo largo de su historia no se caracterizan precisamente por anteponer la razón a la emoción, sino más bien al contrario (como los propios africanos han tenido ocasión de comprobar). ¿Existe, pues, una frontera clara que separe la razón de la emoción? ¿Existe una frontera clara que separe el mytos del logos? Yo no la veo. ********* aq00…
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Demócrito, filósofo y detective
Cuando Watson conoce a Sherlock Holmes queda sorprendido por la amplitud de los intereses de su amigo y su aparente dispersión. En Estudio en escarlata se encuentra la célebre lista de las «áreas de conocimiento» de Holmes: «1. Literatura… Cero. 2. Filosofía… Cero. 3. Astronomía… Cero. 4. Política… Ligeros. 5. Botánica… Desiguales. Al corriente sobre la belladona, opio y venenos en general. Ignora todo lo referente al cultivo práctico. 6. Geología… Conocimientos prácticos, pero limitados. Distingue de un golpe de vista la clase de tierras. Después de sus paseos me ha mostrado las salpicaduras que había en sus pantalones, indicándome, por su color y consistencia, en qué parte de Londres le habían saltado. 7. Química……
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1.6 ¿Qué es la felicidad?
Llega, por fin, el momento de averiguar qué es la felicidad. Ello puede lograrse examinando cuál es la función propia del hombre, “pues parece que lo bueno y el bien están en la función”. Aristóteles constata, en efecto, que cada ser y cada actividad tienen una función que les es propia y en cuyo cumplimiento se realizan y cumplen su especificidad. La función del hombre no puede ser la vida vegetativa, el vivir sin más, pues este tipo de vida es común a las plantas (( “El vivir, en efecto, parece también común a las plantas, y aquí buscamos lo propio [del hombre] (1097b,30)). Tampoco la vida sensitiva, que comparten los…
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La Revelación según Descartes
«Punto 25: Debemos creer todo lo que Dios ha revelado, aunque exceda nuestra capacidad». Y entonces habla Descartes, precisamente, del problema de la Trinidad, asunto al que me referí en un comentario anterior: ¿Cómo conocemos los atributos de Dios? Al margen apunté: «¿Y cómo sabemos qué Dios es el que nos revela todo esto? Quiero decir: ¿qué dios en concreto nos revela todo eso? ¿El Dios Yavhé del Antiguo Testamento, el dios Alah del Islam, el dios trino del cristianismo? Y además: ¿cómo sabemos qué es lo que Dios nos ha revelado? ¿Y cómo sabemos si nos hallamos ante la dificultad de entender una revelación divina o, por el contrario, ante…